El convenio firmado por el Municipio de Manizales con el Departamento de Caldas y el Ministerio de Hacienda, que garantiza las mesadas de pensiones para 650 personas del SES Hospital de Caldas, el Hospital General San Isidro y Assbasalud es, sin duda, una excelente noticia para las familias de esos empleados, que tendrán asegurado ese ingreso legal durante los próximos nueve años.
El convenio es un otrosí por $89.200 millones, dineros que permitirán actualizar los giros pensionales para esas tres instituciones de salud de la capital caldense, lo cual también quita presión a las finanzas de dichas entidades y al global del presupuesto municipal. Además de que esas finanzas podrán verse mucho más equilibradas, esto permite liberar recursos municipales para la inversión, algo tan importante en este momento, en el que es fundamental tener fórmulas para la reactivación económica regional. Del monto total, la Gobernación de Caldas aportará $4 mil millones y la Alcaldía de Manizales $7 mil millones, mientras que el resto llegará proveniente de giros de la Nación.
Hay que destacar en esto las gestiones de la secretaria de Hacienda, Ana María Jaramillo, quien infortunadamente renunció y ya no estará para el resto de gobierno del alcalde Carlos Mario Marín. De acuerdo con la funcionaria, este es el mayor contrato de actualización de pagos de pensiones para el sector salud que haya logrado este año un municipio colombiano con el Gobierno Nacional, lo que hace resaltar su importancia. En este año, en que se ha refrendado la condición vital de los funcionarios de ese sector, debido a la emergencia sanitaria que vivimos, es más que justo que se tenga asegurado ese recurso.
Mientras se van gastando esos dineros en el pago de pensiones de los funcionarios que tienen derecho a ellas, los recursos quedarán depositados en un patrimonio autónomo en la empresa Porvenir, lo que es prenda de garantía de que esos dineros cumplan con el objetivo previsto y no sean desviados para ningún otro fin. De no haberse logrado este convenio, el Municipio de Manizales habría tenido que separar las partidas correspondientes, de recursos propios, para cubrir el pasivo pensional.
Lo que esperamos los manizaleños es que los recursos que se liberan por este concepto sean destinados hacia asuntos que sean realmente prioritarios y que apunten a luchar contra problemas de índole social y económica como el desempleo, el cual se ha visto incrementado durante este año como consecuencia de las medidas restrictivas instauradas para contener y mitigar el avance de la pandemia de covid-19.
Ojalá que esto ayude a aportar mayor tranquilidad a las finanzas locales, las cuales tendrán que ser manejadas con especial cuidado, ante la dictadura fiscal que se hizo necesaria, tras el hundimiento del proyecto de Presupuesto Municipal en el Concejo.
